¿QUÉ ES UNA CASA ENCANTADA?
Por: Jose Manuel García Bautista
Se han hecho populares en estos últimos años, su visión o sólo insinuar la cercanía de una de ellas puede provocar sentimientos y sensaciones enfrentadas… Objetos que cambian de lugar, bruscos descensos de temperatura, extrañas presencias, orbes de luz, ruidos extraños, muñecos que hablan sólo o que parecen cobrar vida… Son algunos de los elementos más usuales cuando la gran pantalla toca el fascinante tema de las CASAS ENCANTADAS.
Se llaman casas encantadas o casas embrujadas a aquellos inmuebles, pisos o edificios en cuyo interior se produce una clara y evidente fenomenología paranormal o sobrenatural.
Habitualmente todo ese conjunto de fenómenos inexplicables producidos en su interior es atribuido a la presencia de fantasmas o poltergeist, a falta de otra explicación que resolvieran los fenómenos que se manifiestan en el mismo.
Su denominación varía, de casas encantadas, embrujadas, enduendadas, infestadas, endemoniadas, del terror, del miedo… Pero todas ellas comparten un punto en común: los fenómenos análogos que se producen en su interior.
Para encontrar una explicación razonable, dentro del campo de lo paranormal, a todo lo que en ellas ocurre tendríamos que revisar concienzudamente el inmueble –para descartar toda hipótesis racional y dar paso a la paranormal-, buscar posibles evidencias de desajustes eléctricos, campos magnéticos, infrasonidos, ultrasonidos, fraudes, roedores y un sin fin de explicaciones. Al final tenemos lo más improbable, que en este caso es lo más posible: el fenómeno paranormal.
Buscaremos en el pasado del edificio o de sus moradores cualquier indicio de hecho violento o luctuoso que pudiera encajar con las descripciones, testimonios o relatos que de un lugar encantados nos realizan y que haya podido canalizar los fenómenos como desencadenante.
El cine o la televisión nos muestra estos edificios encantados como viejos castillos ingleses, o un alma en pena que vaga por su interior purgando eternamente su culpa o alguna suerte de casa “inteligente” que –únicamente- parece encontrar consuelo asustando a los moradores que lo habitan…Muy lejos de la realidad ya que una casa encantada puede ser cualquier inmueble que por causas aún desconocidas se comienza a manifestar una actividad, presuntamente, paranormal que no llegamos a comprender, puede ocurrir en una edificio antiguo o de nueva construcción.
En las casas encantadas se presentan igualmente unos “síntomas” que nos pueden hacer sospechar de una posible infestación (que es como se le denomina), estos son:
Fenómenos ópticos: fenómenos luminosos, orbes o extrañas luces en forma, bolas de luz que se desplazan, sombras y pirogénesis (combustión).
Fenómenos olfativos: sensación de olores extraños (buenos o malos olores dependiendo de la naturaleza de la entidad).
Fenómenos físicos: desplazamiento de objetos sin que nadie actúe sobre ellos de forma física visible, se manifiestan con movimientos de lámparas, cortinas que se mueven, jarrones que se rompen o estallan, caída de objetos y todo lo que implique el movimiento de cualquier de los enseres de la casa.
Fenómenos acústicos: psicofonías principalmente o voces audibles que percibe nuestro oído y que sin embargo no proceden de ninguna persona. Raps (repiqueteo o castañeteo).
Fenómenos atmosféricos: bajadas bruscas de temperatura.
Materialización de objetos: aportes.
Robo de energía: baterías que se descargan o luces que presentan un comportamiento anómalo.
Apariciones: visión de sombras con forma humana e incluso apariciones de personas fallecidas, pueden ser los que desencadenan el fenómeno en el interior del inmueble presuntamente encantado.
Igualmente hay casos muy conocidos de edificios encantados, para la historia quedan el caso Rosenheim, la casa encantada de Ryanham Hall o los nacionales edificios del Reina Sofía (Madrid), el hotel Corona de Aragón (Zaragoza), el restaurante Viandas (Sevilla), la Casa del Obispo (Cádiz) o Diputación de Granada (Granada) por sólo citar algunos ejemplos de ello.